A 7 km del Bed and Breakfast L'Echappée Belle se encuentra un monumento extraordinario: el puente-canal de Briare.
Aunque situado en la pequeña ciudad de Briare, este monumento arquitectónico es también un magnífico paraje natural donde el agua es omnipresente y donde el Loira es su embajador.
¡Cruzar el Loira puede ser difícil! Entre los bancos de arena, el nivel bajo o alto del agua, el río helado en invierno, las crecidas... todos los años se han producido varias muertes. Por eso
hubo que encontrar una solución para cruzar el Loira. Así pues, se construyó un canal lateral y, para pasar de una orilla a la otra, el puente-canal de Briare fue la elección obvia.
El puente-canal de Briare, que atraviesa el Loira, fue construido en cuatro años, entre 1890 y 1894, por 2.000 obreros para hacer posible el cruce del río salvaje y facilitar la navegación
comercial hacia París.
Dada su longitud y su peso en agua (13.000 toneladas), se eligió una estructura metálica para el puente sobre el canal de Briare. Más concretamente, acero dulce de bajo contenido en carbono
y más maleable.
Los talleres de Gustave Eiffel, que en aquella época construían la torre del mismo nombre, participaron en parte en la construcción de esta estructura. Aportaron los cimientos y los 14 pilares de
piedra que sostienen la parte metálica, separados 40 metros entre sí.
El puente del Canal de Briare tiene 662,69 metros de longitud y es el puente metálico más largo de Europa.
Su anchura de 11,60 metros no permite el paso de embarcaciones, por lo que era necesario esperar en una dirección y luego en la otra para cruzarlo. A finales del siglo XIX pasaban por él unos 30
barcos al día.
Hoy en día, las barcazas tiradas por burros han sido sustituidas por embarcaciones de recreo, y se puede dar un paseo por el puente del canal de Briare. Las anchas aceras que han sustituido al
camino de sirga permiten cruzarlo a pie o en bicicleta y admirar el paisaje, pero también la notable factura de la carpintería metálica. El encanto de este lugar se ve reforzado por la presencia
de diversas obras: barreras de hierro fundido, estatuas, farolas...
Cuando cae la noche, el Puente del Canal de Briare se ilumina. A principios del siglo XX, era el único lugar del Loiret iluminado por electricidad gracias a turbinas y dinamos situadas en una
sala específica. Numerosas personas venían de los alrededores para presenciar la iluminación del puente del canal.
También podrá ver la central eléctrica de Briare, construida al mismo tiempo que el puente del canal, que garantizaba el suministro permanente de agua.
¿Lo sabía?
- Los obreros trabajaban a mano y los diestros cobraban más que los zurdos.
- Se necesitaron unos cinco millones de remaches para ensamblar la sección metálica del puente del canal de Briare.
- Briare tiene otra especialidad: los esmaltes.
Si está interesado en esta historia y quiere saber más, puede visitar el Musée des deux Marines, en la entrada de Briare. Muy cerca se encuentra también el Musée des Émaux de Briare.